Imagina el siguiente dilema: te regalan un viaje para visitar un lugar del mundo. Un mes, seis personas, todo pagado. Solo una condición: o eliges el destino o a las cinco personas que te acompañarán. Elijas lo que elijas, deberéis ir todas a los mismos lugares, permanecer juntas y tomar decisiones en común ¿Qué eliges el destino o las personas?
Es cierto. El equipo te acerca o te aleja. Te atrae o te repele.
No he leído el libro, pero añadiría otra variable al supuesto y alguna pregunta.
Quién elige el destino? El mismo grupo de cinco?
Se necesita un líder?
Funciona el disagree and commit?
Necesitamos sentir pertenencia con el quien, o con el qué?
En días dónde los resultados tienen que verse de manera casi inmediata, se contradice con el dicho de si quieres llegar rápido, ve solo, si quieres llegar lejos, ve acompañado.
El dilema no aparece en el libro en sí. Es algo que me planteaba yo al leerlo. Lo que sí aparece es una metáfora que más o menos dice que primero decidas a quién metes en el autobús y luego hacia donde se dirige. El tema al final es si priorizamos la meta o el camino (que por lo general no es solitario)
Totalmente de acuerdo. El sitio más exótico, con la gente equivocada, se arruina. Y el sitio más insípido se vuelve aventura si vas con quien toca. Como bien dices, esto vale para cualquier proyecto personal o profesional: lo que marca la diferencia es con quién andas.
🤣🤣🤣🤣🤣 me muero con el final. Pues yo soy del Real Madrid 🤣🤣🤣 y si vi el partido hasta el final con la entrega de la copa porque mi marido es del Barça 🤣🤣. No nos aburrimos.
Y justo hablas hoy de las personas y nos presentas ese dilema. Pues claro, no había duda. Las personas son la base de todo, son las que lo cambian todo para bien o para mal, pero son ellas nada tendría sentido.
Es que no somos capaces de construir un propósito sin personas. No hay por qué o para qué que diría Unamuno sin alguien. Interesante, gracias.
En demasiadas ocasiones he escuchado lo de que “la gente va y viene, lo importante es el propósito”. No han entendido nada.
Exacto. Nadie es insustituible pero a nadie se le puede reemplazar por completo. Y eso afecta claramente al propósito.
Es cierto. El equipo te acerca o te aleja. Te atrae o te repele.
No he leído el libro, pero añadiría otra variable al supuesto y alguna pregunta.
Quién elige el destino? El mismo grupo de cinco?
Se necesita un líder?
Funciona el disagree and commit?
Necesitamos sentir pertenencia con el quien, o con el qué?
En días dónde los resultados tienen que verse de manera casi inmediata, se contradice con el dicho de si quieres llegar rápido, ve solo, si quieres llegar lejos, ve acompañado.
Me encantó ¯\_(ツ)_/¯
El dilema no aparece en el libro en sí. Es algo que me planteaba yo al leerlo. Lo que sí aparece es una metáfora que más o menos dice que primero decidas a quién metes en el autobús y luego hacia donde se dirige. El tema al final es si priorizamos la meta o el camino (que por lo general no es solitario)
Totalmente de acuerdo. El sitio más exótico, con la gente equivocada, se arruina. Y el sitio más insípido se vuelve aventura si vas con quien toca. Como bien dices, esto vale para cualquier proyecto personal o profesional: lo que marca la diferencia es con quién andas.
Sí, esto es tan, tan importante, cada vez estoy más convencido. Y me toca espcialmente en estos tiempos, gracias 💞
Vaya maravilla, Máximo.
🤣🤣🤣🤣🤣 me muero con el final. Pues yo soy del Real Madrid 🤣🤣🤣 y si vi el partido hasta el final con la entrega de la copa porque mi marido es del Barça 🤣🤣. No nos aburrimos.
Y justo hablas hoy de las personas y nos presentas ese dilema. Pues claro, no había duda. Las personas son la base de todo, son las que lo cambian todo para bien o para mal, pero son ellas nada tendría sentido.
Gracias Máximo.
Un abrazo