Una reflexión sobre lo acontecido en Valencia. Podríamos usar desgracia, desastre, catástrofe o calamidad; podríamos usar desdicha, tragedia e incluso infortunio; podríamos decir crisis, ruina o tal vez accidente, pero la palabra exacta, la que designa con acierto, dando en el centro de la diana, es cataclismo.
Cuando el agua de la inundación baje, cuando la primera definición de la palabra cataclismo ya no aplique, que sea la segunda la que tome la voz y exija ser escuchada. Cuando ya no haya más cadáveres que levantar, levántese el pueblo, descansen los muertos y álcense los vivos gritando ¡Cambio!, gritando ¡Cataclismo!
Cuando el agua de la inundación baje, cuando la primera definición de la palabra cataclismo ya no aplique, que sea la segunda la que tome la voz y exija ser escuchada. Cuando ya no haya más cadáveres que levantar, levántese el pueblo, descansen los muertos y álcense los vivos gritando ¡Cambio!, gritando ¡Cataclismo!
Suscribo cada palabra.
Qué bonito texto. Qué triste suceso. Gracias por ponerle palabras.
Que bien has resumido el pensar de tantos. Un placer leerte, cómo siempre.
¡Muchas gracias por la información! He difundido la página de Notion para que pueda llegar a más gente. Un saludo.