Hace una semana escribí un tweet que decía lo siguiente: «Solo la gente que no ha llevado uniforme en el colegio piensa que el uniforme iguala y evita la comparación, cuando lo que hace es moverla a otros espacios más sutiles.
Creo que apuntas a dos problemas distintos, aunque relacionados.
Por una parte, es cierto que existe una falta de «cultura de la argumentación», que se puede hacer extensible a la cultura de la discusión. No sabemos exponer nuestras ideas de manera ordenada y lógica, lo cual hace mucho más difícil sostenerlas ante los demás para contrastar tesis diversas.
Por otro lado, no es tanto que las redes coarten esa argumentación (como bien dices, no es Twitter/X: serían todas y cada una de las existentes), sino que el clima que propician es de agresividad fugaz, de una suerte de cruce de espadas virtual para ver quién hace el comentario más punzante; pero no con la intención de exponer un argumento, sino de conseguir likes, aplausos.
Excelente la newsletter de hoy, Máximo. Siempre es un placer leerte y pensar contigo.
Fíjate que yo no tengo tan clara esa segunda parte que comentas. Puedo estar de acuerdo en que Twitter ha ido virando hacia un contexto donde se propicia el conflicto. El "for you", sin ir más lejos, es un cajón con lo más conflictivo de la red. Pero eso es algo específico de Twitter. El clima en Instagram no es agresivo, tampoco lo es en TikTok. Lo que sí comparten las tres es un scroll infinito que nos está dejando secos, provocando que cuando uno intenta reflexionar y tomarse el tiempo necesario para argumentar se ve incapacitado para ello.
Un abrazo, Emi. Gracias por acompañarme una semana más.
Es posible que sea así, porque reconozco que apenas uso otra red social aparte de Twitter (bueno, Substack cuenta como red, supongo…), por lo que mi visión a ese respecto puede estar un poquito sesgada.
En todo caso, me gustó mucho el texto y me parece un tema muy interesante de abordar, sobre todo desde tu perspectiva filosófica. Espero próximas entregas XD.
Schopenhauer en "El arte de tener razón" escribió: "Si la naturaleza humana no fuese tan deplorable, en cada debate no deberíamos tener otro objetivo que el de descubrir la verdad.” Pero como bien comenta Emi, existe una falta de cultura de la argumentación.
No tienes que pedir perdón! ☺️ A mí me ha parecido una clase magistral y me he dado cuenta de que sobre algunos temas no sé argumentar, entonces cuando uno no sabe hacer algo, se calla, escucha y aprende.
Pues yo nunca llevé uniforme y mi padre tampoco vendía escopetas.
Te ha faltado mencionar a los que argumentan absurdamente. :)
Muy de acuerdo con tus reflexiones. Yo, en clase, comparto con los alumnos estas y otras falacias y para intentar discrepar de mi explicación a veces ¡las usan! Eso viene al pelo para volver a explicarlas.
De todas formas, no creo que convenga idealizar. Dudo que antes la sociedad predigital argumentara mejor. Aunque sean pocos, encontramos siempre algunos que argumentan magníficamente. Yo me quedo con esos pocos.
No soy yo de los de la nostalgia, precisamente. Pero en este tema sí creo que se argumentaba más antes y por mera estadística habría más casos de buena argumentación. El problema, tal y como yo lo veo, es la pérdida de espacios donde la conversación fluya de tal manera que inste a la argumentación. Esa carencia de espacios provoca que se deje de ejercer la práctica de la argumentación. Obviamente, hay excepciones, pero son eso: excepciones.
Hola Máximo, soy nueva por acá. Me ha gustado mucho tu newsletter.
El año pasado en la facultad (estudio desarrollo de software) aprendimos sobre lógica computacional, por ende vimos lógica proposicional también. Fue la materia que más me gustó junto con comprensión y producción de textos, no porque fueran las menos pesadas en contenido, sino por lo interesantes y nutritivas que eran. Cada semana me volvía a casa con una sensación de "tengo mucho que aprender antes de abrir la boca". Hoy la volví a tener con vos.
Es maravilloso que a quienes estudiáis desarrollo de software se os enseñe lógica y una pena que no se haga también en otros estudios. Aprender a argumentar es muy sano tanto para expresarnos mejor, como para ver si los demás lo hacen o intentan manipularnos.
Me gusta tu enfoque sobre la falta de argumentación, Máximo. Y estoy de acuerdo en esta carencia actual.
Yo lo suelo relacionar con la empatía, la escucha, nuestras barreras al cambio de opinión y a prestar atención a opiniones contrarias.
Creo que esto limita nuestra capacidad de pensar, reflexionar (es lo mismo?) o filosofar (es argumentar?)
Yo nunca llevé uniforme en el colegio, pero cuando lo he hecho en otros entornos, he visto más ventajas que inconvenientes.
Bajo mi punto de vista, dar ejemplo es una de las mejores maneras de mostrar, transmitir y enseñar.
Yo cuando más aprendo es cuando me ponen en contexto, me dan ejemplos o me sitúan en escenarios dispares para comparar (me ayudan a pensar o me condicionan?🤷🏽
Yo agradecería el argumento que acompañe a tu tweet.
Tendría más contexto sobre tu afirmación y daría pie al argumento con tu ejemplo.
Jose Antonio, se me había pasado este comentario tuyo. Disculpa.
Sobre mi Tweet hay mucho que discutir y contraargumentar. Es por eso que me resultó llamativo lo poco que se hizo. Estoy de acuerdo que la empatía, el tener más en cuenta al otro, abre nuestra capacidad de reflexión y también de argumentación. Cuando te tomas en serio al otro, quieres darle argumentos, cuando no lo ves como un igual, solo convencerlo como sea.
En el tema del ejemplo no coincidimos. Creo que es sano aprender a argumentar sin tener que ejemplificar y comprender un argumento abstracto sin tener que aterrizarlo en lo concreto. Sobre todo porque cuando ponemos un ejemplo, la conversación suele girar a si el ejemplo es adecuado o no y perdemos foco.
Estoy de acuerdo en que debemos trabajar nuestras capacidades de comunicación de lo abstracto y términos complejos.
Pero siempre termino empatizando.
Ante la duda de si he sido capaz de ser entendido, opto por acompañarlo de ejemplo.
Habría que contextualizar diferentes momentos. Diferente una conversación uno a uno que ante una audicencia.
No se si de manera individual, nuestra corriente de pensamiento o hábitos de aprendizaje tienden a buscar ejemplos prácticos para memorizar.
Yo si lo hago. Lo ligo a algún ejemplo, me resulta más facil de mantenerlo vivo. El ejmplo me ayuda a la comprensión y al análisis.
Como cuando se utlizaban figuras animales/espíritus para transmitir ética y valores de manera oral en culturas indígenas.
Por otro lado, comentas lo del riesgo de perder foco. Estás en lo cierto. Ocurre.
Pero creo que también puede ser el germen desde donde nazca el intercambio de puntos de vista, desencadenante de reflexiones y estímulo la participación.
Yo creo que Twitter concretamente se ha ido volviendo mucho más polarizado, con poca gente dispuesta a argumentar y mucha gente dispuesto a atacar. De hecho, dejé de publicar en Twitter el mes pasado, aunque este fue menos un factor que el auge de racismo y teorías conspiradoras. Ya muchos con quienes habían interactuado en EE.UU. habían dejado la plataforma hace tiempo, pero en España seguía más o menos igual, pero últimamente bastante peor y ciao.
También veo que es mucho más fácil atacar en lugar de discutir educadamente cuando es digital, no en persona, pero es verdad que pasamos tantísimo tiempo online hoy en día.
Estoy de acuerdo, Kat. La polarización en Twitter es un problema. Pero no creo que en otras redes sociales se argumente más o mejor. El problema va más allá. Es más profundo. Por otro lado, creo que en USA se educa más a los niños y niñas en argumentación y retórica que en España. Esos concursos de debate que vemos en las películas, aquí no se dan. ¿Es así?
De acuerdo que en general no se argumenta mejor en otras redes sociales (quizás un poco con una comunidad muy curada como Substack y más si es suscripción de pago). También probablemente tengo una perspectiva diferente viniendo de EE.UU., que debate y discusión es frecuente en muchas escuelas. Los equipos de debate que ves, sí hay, suele ser una actividad opcional, y ni en todas las escuelas. Pero es habitual argumentar en clase o incluso en una comida con amigos. De acuerdo contigo que la falta de saber argumentar un problema, yo lo veo acentuado en redes sociales aún más que en la sociedad, pero no deja de ser un problema más profundo.
Creo que apuntas a dos problemas distintos, aunque relacionados.
Por una parte, es cierto que existe una falta de «cultura de la argumentación», que se puede hacer extensible a la cultura de la discusión. No sabemos exponer nuestras ideas de manera ordenada y lógica, lo cual hace mucho más difícil sostenerlas ante los demás para contrastar tesis diversas.
Por otro lado, no es tanto que las redes coarten esa argumentación (como bien dices, no es Twitter/X: serían todas y cada una de las existentes), sino que el clima que propician es de agresividad fugaz, de una suerte de cruce de espadas virtual para ver quién hace el comentario más punzante; pero no con la intención de exponer un argumento, sino de conseguir likes, aplausos.
Excelente la newsletter de hoy, Máximo. Siempre es un placer leerte y pensar contigo.
Fíjate que yo no tengo tan clara esa segunda parte que comentas. Puedo estar de acuerdo en que Twitter ha ido virando hacia un contexto donde se propicia el conflicto. El "for you", sin ir más lejos, es un cajón con lo más conflictivo de la red. Pero eso es algo específico de Twitter. El clima en Instagram no es agresivo, tampoco lo es en TikTok. Lo que sí comparten las tres es un scroll infinito que nos está dejando secos, provocando que cuando uno intenta reflexionar y tomarse el tiempo necesario para argumentar se ve incapacitado para ello.
Un abrazo, Emi. Gracias por acompañarme una semana más.
Es posible que sea así, porque reconozco que apenas uso otra red social aparte de Twitter (bueno, Substack cuenta como red, supongo…), por lo que mi visión a ese respecto puede estar un poquito sesgada.
En todo caso, me gustó mucho el texto y me parece un tema muy interesante de abordar, sobre todo desde tu perspectiva filosófica. Espero próximas entregas XD.
Un abrazo, Máximo.
Schopenhauer en "El arte de tener razón" escribió: "Si la naturaleza humana no fuese tan deplorable, en cada debate no deberíamos tener otro objetivo que el de descubrir la verdad.” Pero como bien comenta Emi, existe una falta de cultura de la argumentación.
Siempre que leo esa cita recuerdo que a las clases de Schopenhauer no iba nadie y me da mucha pena.
No tienes que pedir perdón! ☺️ A mí me ha parecido una clase magistral y me he dado cuenta de que sobre algunos temas no sé argumentar, entonces cuando uno no sabe hacer algo, se calla, escucha y aprende.
Luego, da las gracias.
Un abrazo, Máximo.
Nada que no se pueda ejercitar con un poco de dedicación.
Un abrazo y gracias por leer la Honos hasta el final ;)
Pues yo nunca llevé uniforme y mi padre tampoco vendía escopetas.
Te ha faltado mencionar a los que argumentan absurdamente. :)
Muy de acuerdo con tus reflexiones. Yo, en clase, comparto con los alumnos estas y otras falacias y para intentar discrepar de mi explicación a veces ¡las usan! Eso viene al pelo para volver a explicarlas.
De todas formas, no creo que convenga idealizar. Dudo que antes la sociedad predigital argumentara mejor. Aunque sean pocos, encontramos siempre algunos que argumentan magníficamente. Yo me quedo con esos pocos.
Gracias por la publicación.
No soy yo de los de la nostalgia, precisamente. Pero en este tema sí creo que se argumentaba más antes y por mera estadística habría más casos de buena argumentación. El problema, tal y como yo lo veo, es la pérdida de espacios donde la conversación fluya de tal manera que inste a la argumentación. Esa carencia de espacios provoca que se deje de ejercer la práctica de la argumentación. Obviamente, hay excepciones, pero son eso: excepciones.
Muchas gracias por comentar, Javier.
Gracias por escribir esto.
Gracias a ti por leerlo.
Hola Máximo, soy nueva por acá. Me ha gustado mucho tu newsletter.
El año pasado en la facultad (estudio desarrollo de software) aprendimos sobre lógica computacional, por ende vimos lógica proposicional también. Fue la materia que más me gustó junto con comprensión y producción de textos, no porque fueran las menos pesadas en contenido, sino por lo interesantes y nutritivas que eran. Cada semana me volvía a casa con una sensación de "tengo mucho que aprender antes de abrir la boca". Hoy la volví a tener con vos.
Gracias por esto. Un abrazo desde Argentina 🫂🇦🇷
Hola, Bienvenida!
Es maravilloso que a quienes estudiáis desarrollo de software se os enseñe lógica y una pena que no se haga también en otros estudios. Aprender a argumentar es muy sano tanto para expresarnos mejor, como para ver si los demás lo hacen o intentan manipularnos.
Un abrazo de vuelta desde Barcelona.
Me gusta tu enfoque sobre la falta de argumentación, Máximo. Y estoy de acuerdo en esta carencia actual.
Yo lo suelo relacionar con la empatía, la escucha, nuestras barreras al cambio de opinión y a prestar atención a opiniones contrarias.
Creo que esto limita nuestra capacidad de pensar, reflexionar (es lo mismo?) o filosofar (es argumentar?)
Yo nunca llevé uniforme en el colegio, pero cuando lo he hecho en otros entornos, he visto más ventajas que inconvenientes.
Bajo mi punto de vista, dar ejemplo es una de las mejores maneras de mostrar, transmitir y enseñar.
Yo cuando más aprendo es cuando me ponen en contexto, me dan ejemplos o me sitúan en escenarios dispares para comparar (me ayudan a pensar o me condicionan?🤷🏽
Yo agradecería el argumento que acompañe a tu tweet.
Tendría más contexto sobre tu afirmación y daría pie al argumento con tu ejemplo.
Un abrazo! 🤗
Jose Antonio, se me había pasado este comentario tuyo. Disculpa.
Sobre mi Tweet hay mucho que discutir y contraargumentar. Es por eso que me resultó llamativo lo poco que se hizo. Estoy de acuerdo que la empatía, el tener más en cuenta al otro, abre nuestra capacidad de reflexión y también de argumentación. Cuando te tomas en serio al otro, quieres darle argumentos, cuando no lo ves como un igual, solo convencerlo como sea.
En el tema del ejemplo no coincidimos. Creo que es sano aprender a argumentar sin tener que ejemplificar y comprender un argumento abstracto sin tener que aterrizarlo en lo concreto. Sobre todo porque cuando ponemos un ejemplo, la conversación suele girar a si el ejemplo es adecuado o no y perdemos foco.
Te mando un abrazo fuerte.
Gracias por responder Máximo.
Estoy de acuerdo en que debemos trabajar nuestras capacidades de comunicación de lo abstracto y términos complejos.
Pero siempre termino empatizando.
Ante la duda de si he sido capaz de ser entendido, opto por acompañarlo de ejemplo.
Habría que contextualizar diferentes momentos. Diferente una conversación uno a uno que ante una audicencia.
No se si de manera individual, nuestra corriente de pensamiento o hábitos de aprendizaje tienden a buscar ejemplos prácticos para memorizar.
Yo si lo hago. Lo ligo a algún ejemplo, me resulta más facil de mantenerlo vivo. El ejmplo me ayuda a la comprensión y al análisis.
Como cuando se utlizaban figuras animales/espíritus para transmitir ética y valores de manera oral en culturas indígenas.
Por otro lado, comentas lo del riesgo de perder foco. Estás en lo cierto. Ocurre.
Pero creo que también puede ser el germen desde donde nazca el intercambio de puntos de vista, desencadenante de reflexiones y estímulo la participación.
Un abrazo!
Buuuaaahhh espectacular!! Ni idea de cómo argumentar… mucho que aprender 😳😳
Habrá que hacer más Honos en esta línea :)
Un abrazo!
Si por favor!
Yo creo que Twitter concretamente se ha ido volviendo mucho más polarizado, con poca gente dispuesta a argumentar y mucha gente dispuesto a atacar. De hecho, dejé de publicar en Twitter el mes pasado, aunque este fue menos un factor que el auge de racismo y teorías conspiradoras. Ya muchos con quienes habían interactuado en EE.UU. habían dejado la plataforma hace tiempo, pero en España seguía más o menos igual, pero últimamente bastante peor y ciao.
También veo que es mucho más fácil atacar en lugar de discutir educadamente cuando es digital, no en persona, pero es verdad que pasamos tantísimo tiempo online hoy en día.
Estoy de acuerdo, Kat. La polarización en Twitter es un problema. Pero no creo que en otras redes sociales se argumente más o mejor. El problema va más allá. Es más profundo. Por otro lado, creo que en USA se educa más a los niños y niñas en argumentación y retórica que en España. Esos concursos de debate que vemos en las películas, aquí no se dan. ¿Es así?
De acuerdo que en general no se argumenta mejor en otras redes sociales (quizás un poco con una comunidad muy curada como Substack y más si es suscripción de pago). También probablemente tengo una perspectiva diferente viniendo de EE.UU., que debate y discusión es frecuente en muchas escuelas. Los equipos de debate que ves, sí hay, suele ser una actividad opcional, y ni en todas las escuelas. Pero es habitual argumentar en clase o incluso en una comida con amigos. De acuerdo contigo que la falta de saber argumentar un problema, yo lo veo acentuado en redes sociales aún más que en la sociedad, pero no deja de ser un problema más profundo.