Breve recordatorio de que la ausencia de evidencia no es evidencia de ausencia. Breve recordatorio de que se puede encontrar belleza en lo violento y atracción en lo grotesco, así como placer en el dolor y pasión por lo siniestro.
“Breve recordatorio de que se puede encontrar belleza en lo violento y atracción en lo grotesco, así como placer en el dolor y pasión por lo siniestro”.
Me quedo con este, Máximo, porque por alguna razón mi mundo es escribir sobre cosas siniestras, sobre la posición contraria a la buena, sobre personajes que piensan muy distinto y actúan de manera malévola.
El hábito es un maravilloso punto de partida para la reflexión filosófica. El propio Aristóteles lo usaba para hablar del espacio y la escala humana. Para el estagirita, se parte del cuerpo propio para ir ampliando espacio. Así, se comienza ampliando el cuerpo con el hábito, esto es, el ropaje. Se continúa con la habitación, la estancia, la casa. Y se culmina con el hábitat, la ciudad. hábito-habitación-hábitat. El mundo desde nuestra escala y no a escala de nosotros.
Algo así ya te había leído y me impactó, lo importante de la precisión del lenguaje 👌
“Breve recordatorio de que se puede encontrar belleza en lo violento y atracción en lo grotesco, así como placer en el dolor y pasión por lo siniestro”.
Me quedo con este, Máximo, porque por alguna razón mi mundo es escribir sobre cosas siniestras, sobre la posición contraria a la buena, sobre personajes que piensan muy distinto y actúan de manera malévola.
Gracias por tus 12 recordatorios.
Tus textos son maravillosos. Cuando escribí ese recordatorio pensaba en el libro de Eugenio Trías “Lo bello y lo siniestro”. Muy recomendable.
Un abrazo!
“Breve recordatorio de que lo opuesto a “funcional” no es “bello”, sino “disfuncional”.”
Esa precisión es algo que me obsesiona. Lo reconozco :)
"Breve recordatorio de que frente a la ansiedad del propósito, la serenidad del hábito.
Me quedé con este, Máximo.
Rutinas, hábitos, costumbres. Que buen tema para "filosofar" 🙂
Nos ayudan a progresar pero que difícil puede ser cambiarlas cuando se convierten en barreras y están muy interiorizadas.
El hábito es un maravilloso punto de partida para la reflexión filosófica. El propio Aristóteles lo usaba para hablar del espacio y la escala humana. Para el estagirita, se parte del cuerpo propio para ir ampliando espacio. Así, se comienza ampliando el cuerpo con el hábito, esto es, el ropaje. Se continúa con la habitación, la estancia, la casa. Y se culmina con el hábitat, la ciudad. hábito-habitación-hábitat. El mundo desde nuestra escala y no a escala de nosotros.
Te mando un abrazo enorme, Jose Antonio.
Desconocía que estos conceptos estaban ligados.
Mil gracias por compartir conocimiento Máximo 🙏🏼
Otro enorme abrazo!